domingo, 17 de octubre de 2010

Instante previo - Eduardo Cichy

Instante Previo

Cuando mis manos ya no tiemblen
y las voces no me hablen.
Cuando mis latidos torpes no tropiecen,
ni mis pájaros vuelen como ángeles.
Cuando ya no escriba más mi réquiem
y mi pecho solo suelte aire.
Cuando mi silbido se nuble
y, como torbellino, se inquiete mi sangre.
Cuando mis pies dormidos despierten
y mi camino brille como una idea que nace.
Cuando mi pasado no sueñe con mentiras
y el perfume no abandone a los rosales.
Cuando el atardecer se pose en mis pupilas
y su luz convierta al minuto, inacabable.
Cuando el llanto me invada los pañuelos
y su canto de lágrimas me desarme.
Cuando el límite de la vida sea estrecho
y la muerte, negramente, se me instale,
dame un poco de tu vapor de cielo
y dejame respirar el viento de tus labios,
para que cuando tenga mis pulmones llenos,
pueda decir que te estoy tocando.